martes, 6 de noviembre de 2012

Opinión de “La casa de Moreira” (Edgardo y Josefina)

Stella Matute y Alicia Naya se sacan chispas en el espacio escénico de Caras y Caretas. Se mimetizan, se transforman en los personajes que espían y viven la vida de los otros. Con una suerte de voyeurismo antropófago devoran los amores, humores, talento y miserias de su ídolo admirado y odiado hasta el paroxismo. La acción de la obra jugada en dos planos, esta armada como una especie de trapecio en el que las mujeres se cuelgan, saltan, se entrecruzan siempre con el peligro de caer al vacío en el que no hay red que las contenga.

Un espectáculo imperdible, para reflexionar sobre todo en una sociedad en la que campea la violencia de género desde que tenemos memoria. El director Fernando Alegre, explota las posibilidades del espacio al máximo y con tres elementos estimula nuestra imaginación para ir hacia adentro y hacia el afuera infinito del mar, quizás un continuo de vida y muerte, belleza y horror. CAPOLAVORO Stella y Alicia!!!!!

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